El Bioparc Acuario de Gijón reintroducirá en el mar dos tortugas bobas rehabilitadas en sus instalaciones

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La colegiada Susana Acle (izquierda), responsable del Centro de Recuperación de Animales Marinos de Asturias (CRAMA).

El próximo martes 3 de septiembre, el Centro de Recuperación de Animales Marinos de Asturias (CRAMA), ubicado en el Bioparc Acuario de Gijón, llevará a cabo la reintroducción en el medio marino de dos tortugas bobas (Caretta caretta) que han sido rehabilitadas en sus instalaciones.

Esta actividad se realiza gracias a la colaboración entre los distintos participantes de la Red de Varamientos del Principado de Asturias y cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad y la Fundación Bioparc.

 Detalles de las tortugas:

La primera tortuga es la que inauguró el CRAMA. Fue rescatada en la playa de Bañugues a finales de enero del año pasado, en condiciones críticas, con una aleta estrangulada por plásticos y restos en su estómago. Tras un proceso intensivo de recuperación, que incluyó la amputación de la aleta dañada y un riguroso proceso de recuperación, incluyendo pruebas de natación en profundidad, la tortuga está lista para volver al mar.

La segunda tortuga, un juvenil, fue encontrada en el Puerto de Lastres hace unos meses. Llegó sin un ojo, heridas en las aletas y plásticos en el estómago, además de una neumonía. La intervención del equipo del CRAMA, con el apoyo del personal de Bioparc Acuario de Gijón, ha sido crucial para su rápida recuperación.

Ambas tortugas están listas para ser reintroducidas en su medio natural.

Suelta y geolocalización:

La suelta se llevará a cabo el martes 3 de septiembre, entre las 9:30 y las 10:30 horas, si las condiciones meteorológicas lo permiten.

Las tortugas serán reintroducidas a varias millas de la costa desde la embarcación de la Dirección General de Pesca del Principado de Asturias. De este modo, estarán en una zona segura, lejos de los peligros de la costa, como los anzuelos de pesca o las embarcaciones.

La temperatura del agua, que se espera esté entre 19 y 20 grados centígrados, será ideal para la suelta.

La tortuga cuya aleta tuvo que ser amputada llevará un transmisor que ayudará a realizar un seguimiento más exhaustivo de la misma. Está descrito que estos individuos, incluso con tres aletas, pueden sobrevivir en el medio marino, pero desde el CRAMA se pretende tener más datos en este sentido y monitorear su adaptación. Uno de los objetivos del centro de recuperación CRAMA Bioparc es, también, la investigación del medio marino y sus habitantes más amenazados y sometidos a la presión humana.

 Acción divulgativa:

El evento de la suelta no solo marcará el retorno de las tortugas al mar, sino que también servirá como una plataforma educativa y de sensibilización para el público. En el Muelle de Tránsito, junto a las oficinas del Puerto Deportivo de Gijón, se instalará un espacio informativo que contará con una mesa con material educativo y el personal de Educación del Bioparc Acuario de Gijón. Este punto informativo estará destinado a niños, familias y cualquier interesado en aprender sobre la conservación de las tortugas marinas y los peligros asociados a la contaminación plástica.

Esta iniciativa busca no solo educar sino también inspirar a la comunidad a involucrarse activamente en la preservación del medio ambiente marino. La participación está abierta a todos, fomentando una mayor conciencia y compromiso hacia la conservación de la fauna marina.